A pesar de que yo estimé una cifra incluso menor a la que ha llegado en este su primer fin de semana, la recaudación que ha tenido The Green Lantern en tres días es una de las más grandes decepciones que el verano americano trae consigo este 2011. Sin competencia fuerte, con una semana previa tibia (Super 8 no llegó ni a los 40 millones), esta era la película que debía dominar el mes de junio, convertirse en el Toy Story 3 de este año, considerando que ambas se estrenaron en la misma semana, con contextos de competencia similares. Dos graves problemas que afectaron a la cifra de Green Lantern: la pésima película que ha resultado ser, como confirman no sólo críticos, sino el público encuestado saliendo de las salas, pero por encima de todo la terrible publicidad y la desalentadora campaña con la que Warner Bros la ha llevado a pantalla grande. El 'verano americano' suele estar plagado de malas películas, pero con una buena estrategia de marketing, medio engañosa, siempre se consiguen buenas cifras.

Problemática la cifra conseguida por muchos más aspectos. Green Lantern es un superhéroe mucho más conocido que Thor, una especie de nostalgia se desprende del personaje, pero aún así el héroe nórdico logró una mejor cifra en su primer fin de semana, con 65.7 millones de dólares. Incluso X-Men: First Class y la incertidumbre alrededor del proyecto lograron convocar 55.1 millones de dólares en tres días. Pero el jaque mate en realidad llega con una simple comparación con el presupuesto invertido en el proyecto: la Warner Bros habría gastado 200 millones de dólares en la filmación de la película. Ouch. Otro dato importante a recalcar, sólo el 45% del ingreso llega de su exhibición en salas 3D, lo cual marca una tendencia en este 2011: parece que el boom del 3D empieza a esfumarse, ya que tanto Kung Fu Panda 2 como POT: On Stranger Tides han tenido porcentajes en caída en lo que a tercera dimensión se refiere. ¿Se avecinará la muerte del 3D?

El otro ingreso al ranking de esta semana es el de Mr. Popper's Penguins, la nueva comedia familiar de Jim Carrey que también falla a la hora de hablar de expectativas previas. Para ser un regreso al mainstream de Carrey, actor que ha estado en el circuito independiente el último año con una lucha continua por estrenar I Love You Phillip Morris, el comeback ha pasado desapercibido. Esta es una de las cifras más bajas que haya conseguido Carrey en su carrera en un primer fin de semana, en lo que a comedias se refiere.

Esta semana ingresará a carteleras yankis lo nuevo de Pixar, Cars 2. ¿Será que el estudio dominará el box office este año también, como lo hiciera en el 2010 con Toy Story 3? ¿Será que esta secuela logre superar a la primera bochornosa parte? ¿O tendrá que cargar con la condena de una anodina Cars (2006) que aún no es superada por cinéfilos, y así naufragar en recaudaciones? Veremos.